Dolo

El dolo es un acto que debe ser investigado, perseguido y, en su caso, sancionado conforme a la ley. ¿Sabes qué es dolo? La definición de dolo es una persona comete o deja de cometer un acto de una de dos maneras: intencionalmente, es decir, con intención o imprudentemente.

Únicamente se consideran dolo aquellas acciones que estén previstas en la ley penal y sean cometidas por una persona de forma intencionada o temeraria.

El Código Penal es un conjunto de normas que determinan y regulan la facultad del Estado para sancionar a una persona natural o jurídica, ciudadano, empresa o sociedad antes de que cometa un delito. Esta ley define qué acciones son delitos (como el robo, la falsificación, la calumnia, el asesinato...) y las penas (desde multas hasta prisión) para quienes las cometen.

¿Qué constituye fraude?

El dolo es la intención consciente de realizar una acción sabiendo que tendrá consecuencias perjudiciales para los demás. Al elegir omitir intencionalmente una acción, también está actuando intencionalmente, sabiendo que si no lo hace, dañará a la otra persona.

Un ejemplo habitual de delito doloso es el hurto: una persona entra en una joyería y, sabiendo lo que está haciendo ilegalmente, decide embolsarse el collar y salir de la tienda sin pagar. Cometerán robo, el fraude se manifiesta en el hecho de que una persona sabe que con sus acciones causa daño a otros (daño a la propiedad del empresario) y es ilegal hacerlo.

Este es el tipo de delito más grave: la comisión de una infracción penal (conducta tipificada como delito) con la intención o el intento de causar daño a otra persona será siempre sancionada.

El dolo consta de dos elementos: el elemento intelectual, que es la conciencia o conocimiento de los elementos que componen la manera o el acto, y la voluntad, el deseo de hacer esos elementos. Por lo tanto, debe estar presente el consentimiento consciente y la intención dolosa. Si ninguno de estos dos elementos está presente, no se produce fraude, por lo que no se aplica el tipo de fraude.

Sin embargo, es posible cometer inadvertidamente actividades ilegales. Nos enfrentaremos al brutal crimen. El hecho de que el acto no haya sido intencional no significa que no sea un delito, solo que las consecuencias penales serán diferentes. Para entender esta situación, imaginemos un atropello y fuga accidental que resulta en la muerte. El conductor del vehículo será culpable de homicidio imprudente.

Finalmente, es importante recalcar que el no saber que una acción u omisión puede ser constitutiva de delito no exime a una persona de responsabilidad penal.

¿Qué tipos de dolo hay?

La clasificación de los tipos de dolo se realiza según la idea del autor:

Dolos directos o primarios

Esto es básicamente un comportamiento caprichoso. El perpetrador comete intencionalmente el acto ilegal, lo realiza y logra el resultado.

Por ejemplo, alguien que planea matar a otra persona. Sabía que matar era un crimen y, sin embargo, hizo todo lo necesario para lograr lo que quería: matar a otro ser humano.

Para fines indirectos o secundarios

Este tipo de fraude ocurre cuando una persona no quiere realizar una acción prohibida, pero sabe que su acción debe llevarse a cabo. El autor no quiere resultados, pero está completamente de acuerdo en que sus acciones traerán resultados.

Ejemplo: Un terrorista quiere atacar una oficina política y decide colocar una bomba en un vehículo. La industria del turismo está dirigida por trabajadores del mismo lado político que él quiere atacar. El terrorista sabe que sus acciones (explosivos en el automóvil) también herirán o matarán a los empleados, y reconoce que este es un resultado necesario para lograr sus objetivos. En este caso, además de asesinar a un político, también puede ser acusado de asesinar a otra persona.

Dolo Intención

En este tipo de delito es menos probable que la acción cause daño que en el fraude indirecto, pero el perpetrador también es consciente de que puede causar daño y continúa con el comportamiento.

Por ejemplo, un tipo que decide robar el bolso de una dama en una motocicleta. Sabía que esto probablemente haría que la mujer perdiera el equilibrio y se cayera. No tiene que suceder, pero puede. Sin embargo, ella decidió agarrar su bolso y llevar a cabo el robo, y en su lugar la señora se cayó y se rompió la cadera. Además del delito de robo, el ladrón también comete una lesión porque actuó con la mayor intención.

En conclusión, en el caso de dolo, el acto es siempre voluntario y sabiendo que sería una violación de la ley.

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